miércoles, 11 de junio de 2008

Conocé a tu chico según lo que mira en TV!

Ya los clasificamos por todos lados: por su auto, por su vestimenta y hasta por la relación que tiene con su mamá; pero gracias a la gran oferta de programas que nos da la televisión llego una nueva clasificación...


  • Hombre-amar-series-norteamericanas. En un principio fueron los programas de cabecera de nosotras (Friends, Sex and the City, The Nanny) pero poco a poco se fueron convirtiendo en objeto de deseo del sexo masculino. Así fue como llegó, entre otros, CSI y 24 para avivar en los hombres su gen de detective. Pero todo cambio realmente cuando un avión se estrello en una isla no del todo desierta. Lost logró lo que ni cumpleaños, aniversarios ni fiestas de todo tipo habían logrado: a partir de esta serie nuestros chicos comenzaron a cancelar el fulbito con tal de no perderse el último episodio y alcanzaron un efecto bastante parecido a la reacción cuasi lógica ante la pelota girando: ojos perdidos en punto fijo, boca abierta, cerebro desenchufado.
    Este es un hombre fácilmente hipnotizable...así que esos son los momentos para decir cosas que queremos que pasen a la ligera como “en un momento de locura y depresión, me gasté 400 pesos en un jean” así no te dicen BOLUDAAA y justamente no es el clima adecuado para plantear un tema serio porque no te van a escuchar.

  • Macho Total sport. Dichosas eran las mujeres que sólo lidiaban una vez por semana con los programas deportivos de su chico. El bendito domingo era el día del conflicto gracias al Fútbol de primera. Pero ahora, gracias a que alguien tuvo la democrática idea de televisar TODOS los partidos, incluido el resumen de goles, más el tenis, el rugby, el polo, el básquet, el jockey... ¿pero desde cuando a los hombres se les acelera el corazón con un torneo del golf? Déjense de joderrr!!! Este tipo de hombres acaparan la caja boba y el control remoto...evidentemente necesitan algo con qué engancharse, sea lo que sea, se ve que su vida no es muy emocionante y es lo único que quieren hacer cuando llegan a casa. Ojo, que no se convierta en un inútil.

  • Monsieur Gourmet. A estos hombres podemos encontrarlos paseando por las góndolas “delicatessen” del supermercado. En sus cocinas (y no hace falta que vivan solos porque se lo pedirán a su madre, padre, tutor o encargado) nunca faltaran variedades de te, salsa de soja, y todo tipo de alimento considerado poco común. Conocen a Narda Lepes mejor que a su propia hermana. Nosotras, ilusas, morimos por conquistar a este tipo de hombres así abandonamos el arte culinario pero ATENTAS! No todo varón gourment es un mago en la cocina. Este hombre pertenece a una tribu (fruto de exceso de canales de cocina) de seres omnipotentes y mandados hacer para las criticas, lo que nos convierte a nosotras en sus eternas asistentes y a ellos el teóricos del buen comer. Aprovechen y siéntense ustedes a ver la tele mientras el otro cocina!!! Ya que estamos...unas ganas de que se parezca a Martiniano...

  • Discovery novio. Odiaban historia en el secundario y se copiaban en biología. Pero sin embargo un dia se hipnotizaron con los canales del final del zapping. Son amantes de la programación de canal á y descubrieron gracias a las entrevistas de People and Arts que Tom Hanks no solo hace películas cómicas. En su interior este hombre aloja a un verdadero aventurero...lo que significa que está preparado para afrontar los riesgos de la vida. Igual fijate si tenés ganas de irte de vacaciones este año a la selva eh...

  • Chongo animado. Para poder manejarse en la vida, este tipo de hombres utilizan un tipo de Biblia cuyos protagonistas viven en una cuidad llamada Springfield. Porque para los fanáticos de los Simpsons TODO TODITO tiene comparación con algún capitulo de la serie. Le decís que querés hacer dieta y te cantan “No vives de ensalada, no vives de ensalada” y cuando se ríen hacen un sonito parecido al de Nelson “HA HA”. Al principio parecen hombres sensibles pero esconden a un inmaduro en potencia, pero no es dañino mientras que no se mimetice con Homero.

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